Nunca he creído en un cielo común en el que nos juntemos todos a mogollón. Lo mío es más de paraíso personalizado, donde te encontrarás con todos aquellos con los que hayas sido feliz.
Y allí, en ese lugar, espérame. Hoy te has ido, y aunque estoy muy triste, dentro de mí, brilla la luz de la esperanza, sé que nos volveremos a ver, volveremos a estar juntos, a revolcarnos por el césped, y sé, que mientras yo no llegue estarás bien acompañado, así que dales un lengüetazo de mi parte a Pachi, Pituqui, Centella, Lluneta y Fosca.
Siempre te llevaré en mi corazón.
Hay un lugar donde nuestras miradas se encontraran
Un lugar donde me sentaré a tu lado frente al mar
Donde pasearemos juntos en libertad
Hay un lugar donde mis caricias serán eternas
Un lugar donde tendremos tiempo de jugar
Donde nada ni nadie nos podrá separar
Un lugar donde me sentaré a tu lado frente al mar
Donde pasearemos juntos en libertad
Hay un lugar donde mis caricias serán eternas
Un lugar donde tendremos tiempo de jugar
Donde nada ni nadie nos podrá separar
Gracias por estos once años.
2 comentarios:
Lo siento cielo.
Ahora eres algo más grande porque tienes en ti, todo lo que aprendiste de él.
Un fuerte beso.
Mil gracias Ana, cuánta razón tienes, porque aunque el vacío que sin él ha quedado es muy grande, pero mucho más grande es todo lo bueno que me ha dejado, y lo que me ha hecho crecer.
Mil besos.
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